Una patología del sistema cardiovascular caracterizada por presión arterial alta se llama hipertensión. Esta enfermedad es tratada por cardiólogos, terapeutas, neurólogos y nefrólogos.
La hipertensión o hipertensión esencial es un aumento persistente de la presión arterial. Se observa un aumento temporal de la presión arterial en personas durante el ejercicio, el estrés y otras condiciones a las que se adapta el sistema cardiovascular. Una persona que sufre de hipertensión experimenta un aumento constante de la presión arterial. Los médicos incluyen dolor de cabeza, dificultad para respirar, dolor en el pecho y pulsaciones palpables en las sienes como síntomas característicos de la patología. Sin tratamiento, la hipertensión crónica puede complicarse con enfermedades del corazón, los riñones, el cerebro y otros órganos.
Esta enfermedad es tratada por: un cardiólogo y terapeuta.
La presión arterial es causada por el movimiento de la sangre a través de los vasos. En el momento de la contracción del corazón se produce un aumento de la presión (indicador sistólico), y en el momento de la relajación del órgano, se produce una disminución de la presión arterial (indicador diastólico). La hipertensión es uno de los trastornos más comunes del sistema cardiovascular. Puede ser una patología independiente o una consecuencia de enfermedades de los riñones, las glándulas suprarrenales y otros órganos. La hipertensión se diagnostica con mayor frecuencia en hombres y mujeres mayores de 65 años.
Síntomas de hipertensión
Las manifestaciones de hipertensión dependen del grado de aumento de la presión arterial y de la causa de la patología. Los cambios en la presión arterial pueden afectar negativamente a cualquier órgano, pero los pacientes experimentan principalmente trastornos del sistema nervioso y de los riñones. En las personas que padecen hipertensión, ocasionalmente puede producirse un aumento de la presión y el resto del tiempo los síntomas desagradables desaparecen.
Síntomas y signos:
- Mareos y dolores de cabeza;
- Sensación de pulsación en diferentes partes del cuerpo, como la nuca y las sienes;
- Sensación de "niebla en la cabeza", disminución de la agudeza visual;
- Tinnitus y latidos cardíacos audibles;
- Insomnio y fatiga;
- Pérdida de apetito y náuseas;
- Dolor compresivo en el pecho;
- Dificultad para respirar en reposo y durante una actividad física ligera;
- Aumento de la sudoración;
- Enrojecimiento facial;
- Hinchazón de manos y cara.
Otros síntomas dependen de las causas y complicaciones de la hipertensión. Estos pueden ser síntomas de disfunción cerebral, discapacidad visual o patología de otro órgano.
Causas de la hipertensión
Los cardiólogos distinguen entre hipertensión primaria (esencial), que se detecta en la mayoría de los casos, e hipertensión secundaria, que surge como una complicación de otras enfermedades. Los médicos consideran la obesidad, el estrés crónico, la herencia desfavorable, la aterosclerosis, los malos hábitos y la mala alimentación como factores de riesgo para desarrollar la enfermedad. Puede producirse un aumento de la presión arterial debido a vasoconstricción, desregulación del sistema cardiovascular, cambios hormonales y otros factores.
Otras razones:
- Enfermedades de los riñones y las glándulas suprarrenales. Las funciones de estos órganos juegan un papel importante en la regulación del sistema cardiovascular. La hipertensión secundaria puede desarrollarse en el contexto de pielonefritis crónica, glomerulonefritis, tumores suprarrenales y otras patologías;
- Enfermedades de la tiroides. Este órgano secreta hormonas necesarias para regular el funcionamiento del cuerpo;
- Enfermedades metabólicas y sanguíneas, como diabetes, hiperlipidemia y aterosclerosis;
- Enfermedades infecciosas e inflamatorias crónicas;
- Factores hereditarios que causan disfunción del sistema cardiovascular;
- Patologías del sistema reproductivo femenino, complicadas por desequilibrio hormonal.
Determinar la causa de la hipertensión secundaria es muy importante para el tratamiento.
Obtenga una consulta
Si experimenta estos síntomas, le recomendamos que programe una cita con su médico. La consulta oportuna evitará consecuencias negativas para su salud.
¿Por qué elegir una clínica profesional?
- El tratamiento se lleva a cabo de acuerdo con las guías clínicas.
- Evaluación integral de la naturaleza de la enfermedad y pronóstico del tratamiento.
- Modernos equipos de diagnóstico y laboratorio propio.
- Alto nivel de servicio y política de precios equilibrada.
Diagnóstico de hipertensión en una clínica moderna.
Si aparecen síntomas de hipertensión, conviene concertar una cita con un cardiólogo. El médico de la clínica pregunta al paciente sobre sus quejas y estudia en detalle los datos anamnésicos para identificar los factores de riesgo de la enfermedad. Luego se realiza un examen primario, que incluye un examen general, escucha (auscultación) del corazón y medición de la presión arterial con un tonómetro. El cardiólogo confirma la presencia de patología mediante la anamnesis, los signos externos y también mediante la detección repetida de una presión sistólica superior a 150 mm. rt. Arte. y presión diastólica superior a 95 mm. rt. Arte. Después de esto, el médico prescribe estudios adicionales para determinar la causa y la forma de la enfermedad.
Métodos de diagnóstico utilizados:
- Medición dinámica de la presión arterial, que permite excluir la hipertensión situacional (natural). El médico toma medidas de la presión arterial en un ambiente tranquilo. Antes de esta prueba, es necesario abstenerse de realizar actividad física, fumar, beber alcohol y tomar ciertos medicamentos. El cardiólogo mide la presión en ambos brazos colocando un manguito tonómetro a 2, 5 cm por encima del codo. Para mayor comodidad, el paciente puede permanecer acostado o de pie. El estudio se realiza a intervalos de 2 a 5 minutos para obtener varios indicadores y determinar el nivel promedio de presión arterial;
- Análisis de sangre general y bioquímico. El cardiólogo deriva al paciente para este estudio para detectar los factores de hipertensión. En la sala de tratamiento, la enfermera trata la fosa antecubital del paciente con un antiséptico, aprieta el brazo en la zona del hombro con un torniquete y extrae sangre con una jeringa. En el laboratorio, los especialistas determinan los niveles de lípidos, creatinina, hormonas, glucosa y potasio en una muestra de sangre. También se determinan la proporción y la cantidad de células sanguíneas;
- Análisis de orina. El médico explica al paciente cómo y a qué hora es necesario llenar un recipiente esterilizado con orina. Las pruebas de orina en el laboratorio le permiten evaluar la efectividad de la filtración renal e identificar enfermedades inflamatorias del sistema excretor;
- La electrocardiografía es un estudio de la actividad eléctrica del corazón, que permite detectar las causas y signos de la enfermedad. Durante el procedimiento, el médico pide al paciente que se acueste boca arriba y coloca sensores (electrodos) en diferentes partes del cuerpo. Luego se recoge y descifra el cardiograma;
- El examen por ultrasonido del corazón es el método más seguro para examinar el corazón y permite detectar cambios patológicos en el órgano, como el engrosamiento de las paredes del ventrículo izquierdo. El médico pide al paciente que se acueste boca arriba y presiona el transductor contra la piel para obtener una imagen del corazón en el monitor.
La clínica profesional moderna cuenta con un laboratorio que permite a los médicos realizar investigaciones modernas y obtener rápidamente resultados de diagnóstico confiables. Si es necesario, el cardiólogo prescribe al paciente un estudio del cerebro, los riñones y otros órganos afectados por la presión arterial alta.
Tratamiento de la hipertensión
Al prescribir el tratamiento, el cardiólogo de la clínica se centra en los resultados del diagnóstico y el estado del paciente. Se prescribe un régimen de tratamiento individual destinado a normalizar la actividad del sistema cardiovascular, eliminar los síntomas de la hipertensión y prevenir complicaciones peligrosas. Además de la terapia con medicamentos, el cardiólogo debe prescribir una dieta necesaria para mejorar el funcionamiento de los vasos sanguíneos y los riñones. El cumplimiento de las prescripciones de profesionales especialistas ayuda a mejorar significativamente la calidad de vida.
Métodos de tratamiento para la hipertensión:
- Prescripción de diuréticos tiazídicos. Estos son diuréticos que estimulan los riñones para eliminar más líquido del cuerpo. El médico prescribe estos medicamentos para eliminar la hinchazón y normalizar la presión arterial;
- Prescripción de inhibidores de la ECA. Estos medicamentos se utilizan para suprimir los vasoconstrictores y reducir la presión arterial. Además, estos medicamentos se recetan para tratar la causa subyacente de la hipertensión asociada con la enfermedad renal;
- Uso de antagonistas de los receptores de angiotensina II. El cardiólogo prescribe estos medicamentos para suprimir la actividad de factores que contraen los vasos sanguíneos;
- Uso de bloqueadores de los canales de calcio. Estos medicamentos relajan los músculos de las paredes vasculares y reducen la frecuencia cardíaca, reduciendo así la presión arterial;
- Uso de alfa y betabloqueantes. Si es necesario, el cardiólogo prescribe medicamentos de estos grupos para reducir la frecuencia cardíaca, aliviar la carga sobre el corazón y dilatar los vasos sanguíneos;
- Uso de antagonistas de la aldosterona. El principal efecto de estos medicamentos es mejorar la función renal, que se manifiesta en una mayor secreción de líquido y sal. Gracias a este efecto se consigue una disminución de la presión arterial;
- Prescripción de terapia farmacológica adicional, incluidos inhibidores de la renina, hipolipemiantes, sedantes y vasodilatadores.
Al prescribir un régimen de tratamiento individual, el cardiólogo de la clínica tiene en cuenta los estándares modernos para el tratamiento de la hipertensión. Para controlar el tratamiento, el médico prescribe periódicamente exámenes instrumentales y de laboratorio. Los endocrinólogos, nutricionistas y otros médicos, si es necesario, prescriben métodos adicionales para tratar la hipertensión.
Prevención de la hipertensión
El desarrollo de enfermedades cardiovasculares peligrosas se puede prevenir mediante cambios en el estilo de vida y otras medidas preventivas.
Métodos de prevención:
- Mejorar su dieta, incluyendo evitar alimentos grasos, demasiado salados y fritos;
- Dejar el alcohol y los cigarrillos;
- Reducir el peso corporal y realizar actividad física regular;
- Tratamiento oportuno de enfermedades de los riñones y órganos endocrinos.
Una consulta con un cardiólogo le ayudará a elegir un régimen de prevención individual y a someterse a exámenes para detectar factores de riesgo de hipertensión.